Hábito y memoria muscular

En el podcast de Aprendiendo GTD estamos dedicando muchos episodios al “tema” de los hábitos.
También le había dedicado una serie en el blog (no en este)

En su momento, catalogué como una forma de hábitos, ciertas secuencias de movimientos que automatizamos.
Mencioné a modo de ejemplos el atarse los cordones de los zapatos, orientarse de noche, totalmente a oscuras hacia un interruptor, el aprendizaje que se da para andar en bicicleta o cómo automatizamos la búsquueda de los iconos en nuestras pantallas del móvil.

Tan a gusto me quedé.

Sin embargo, no mucho después me encontré con bastantes personas que llamaban (llaman) a esto “memoria muscular”
¿Los músculos tienen memoria? ¿metí la pata hasta el fondo?

Me puse a indagar.
Obtuve una de cal y otra de arena

La de cal:  Existe la memoria muscular
La de arena: La memoria muscular no tiene nada que ver con movimientos aprendidos y automatizados

Lo explico.

La memoria muscular es la capacidad que tiene el músculo de almacenar, recordar y recuperar información relacionada con la hipertrofia, lo que facilita que las personas que han hecho deporte puedan recuperar su forma física más rápidamente después de un periodo de inactividad.

La memoria es un proceso en el que se codifica, almacena y recupera información. Para los vertebrados, la visión moderna ha sido que solo ocurre en el cerebro. Esta revisión describe una memoria celular en el músculo esquelético en la que la hipertrofia se “recuerda” de tal manera que una fibra que anteriormente ha sido grande, pero que posteriormente perdió su masa, puede recuperar la masa más rápido que las fibras ingenuas.

(Fuente: Journal of Experimental Biology)

Inapelable.

Sin embargo es frecuente escuchar y sobre todo leer que la memoria muscular está asociada a automatismos. 

Estos movimientos, automatizados por repetidos, y repetidos, son efectivamente fruto de la memoria, pero no de la  memoria muscular (que nada pinta aquí), sino de memoria tradicional, la del cerebro: Son fruto del aprendizaje y ese aprendizaje tiene un nombre: memoria procedimental.

La memoria procedimental es no declarativa, o sea que es fruto de la repetición, no del estudio (como el hábito)

La memoria procedimental una vez asentada crea circuitos cerebrales específicos, que hacen que sea muy persistente al olvido (como el hábito)

La estructura anatómica (cerebral) asociada, el núcleo estriado dorsolateral , es el principal núcleo de células cerebrales relacionado con la memoria procedimental y está relacionado  también con la adquisición de hábitos.

Tan a gusto me quedé.