Un hiperenlace es un enigma
Sabes dónde estás, pero no sabes a dónde vas.
Sabes de dónde partes, pero no dónde acabarás.
Pinchar en un hiperenlace solo es para los osados, los curiosos, los que buscan sorprenderse…
… Pero también quién no tiene rumbo, el que se aburre, el que busca, sin saber qué, el que necesita…
Quizá sólo te ayude a matar el tiempo, o quizá te ayude a descubrir tu verdadera vocación
Escondido, detrás de un hiperenlace siempre hay un enigma: puede ser un momento de felicidad, o una provocación, un estímulo o nada útil.
Todo depende en parte de su autor y en parte de tus ganas de aventura